El documento determina las acciones a desarrollar, con base en los estudios y valoraciones que se han efectuado sobre el riesgo que presenta el territorio insular, y concreta los dispositivos y recursos disponibles para ello

El Plan Anual de Prevención, Vigilancia y Extinción de Incendios Forestales de la Isla para 2025 ya tiene el visto bueno del Consejo de Gobierno Insular del Cabildo de Gran Canaria, que este lunes refrendó este documento, en el que se determinan todas las actuaciones a desarrollar con base en los estudios y valoraciones que se han efectuado sobre el riesgo que presenta el territorio insular en la actualidad y el previsible para el futuro, dado el aumento de la superficie forestal y la influencia que tiene el cambio climático en el desarrollo de este tipo de siniestros.

Así, con estos fines, este Plan aborda el problema de los incendios forestales y de interfaz urbano-forestal desde dos perspectivas: la preventiva y la operativa. En concreto, en materia de prevención, define las acciones encaminadas a evitar o reducir los incendios forestales y sus efectos, principalmente con la creación de áreas de baja carga y con programas preventivos específicos basados en investigaciones acerca de su causalidad y, en particular, de las motivaciones que puedan ocasionar intencionalidad en su origen, y se señalan medidas para prevenirlos, detectarlos y extinguirlos de manera coordinada.

Y en lo que se refiere al ámbito operativo, el propósito es regular la vigilancia, utilización, coordinación y movilización de los medios y recursos de los organismos públicos y privados que existen en Gran Canaria con la máxima eficacia posible, en las situaciones de emergencia por incendios forestales, en coherencia con el principio de que, en esas ocasiones, la protección de la vida y la seguridad de las personas prevalecen frente a cualquier otro valor

Hay que resaltar que este Plan, que permanece activo continuamente y tiene una vigencia indefinida, con actualizaciones al menos cada año, establece tres épocas de peligro de incendios forestales: la temporada alta, que discurre del 1 de julio al 30 de septiembre; la media, entre el 1 y el 30 de junio y el 1 y el 31 de octubre, y la baja, que transcurre del 1 de noviembre al 31 de mayo, de modo que a cada una le corresponden diferentes acciones de carácter preventivo.

Análisis pormenorizados y valoraciones

El documento, que ha sido elaborado por las y los especialistas de la Consejería de Medio Ambiente, Clima, Energía y Conocimiento, que dirige Raúl García Brink, contempla todas las variantes que condicionan los incendios forestales en la Isla, para lo que se ha efectuado un análisis del territorio insular, tanto en cuanto a su fisiografía, a su vegetación, a los espacios naturales protegidos que posee y a su climatología.

Aborda, asimismo, la situación socioeconómica de Gran Canaria, junto a un estudio de los riesgos de incendio y la zonificación de la Isla de acuerdo con ese parámetro. En este sentido, incide en que el abandono de los aprovechamientos y usos tradicionales forestales (recolección de leñas, horquetas y pinocha, entre otros), de la actividad agrícola en la interfaz agrícola-forestal y de la ganadería extensiva controlada han favorecido la generación de una matorralización del medio forestal, que da lugar al aumento del combustible disponible en lugares de alto riesgo. Además, pone de relieve que la cercanía de los núcleos urbanos a las zonas forestales y los cambios de usos y actividades en el monte favorecen el desarrollo de espacios de esparcimiento y disfrute más propias del sector servicios, que incrementan el riesgo de incendios accidentales o debidos a negligencias.

En el contexto relativo a la causalidad, concreta los resultados de los 182 incendios que se registraron en la Isla durante el período 2013-2023, de los que se determinó la causa inmediata en 140 casos, y destaca que 97 (69,28%) se debieron a imprudencias o negligencias, mientras que 34 (24,28%) fueron intencionados y siete (5%) tuvieron un origen accidental o fortuito, representados básicamente por la ignición de vehículos a motor en vías situadas en el monte o proximidades, el uso de herramientas manuales en trabajos silvícolas y la rotura de tendidos eléctricos por causas ajenas a su mantenimiento.

Igualmente, el Plan incorpora un mapa de riesgo por incendios forestales de la Isla, en el que se reflejan ocho Zonas de Alto Riesgo de Incendios Forestales, que en Gran Canaria (ZARI), que alcanzan una superficie total de 64.488,43 hectáreas. Se trata de los pinares de los macizos de Inagua, Pajonales y Tauro, los del macizo de Pilancones, los de la cumbre central, los del macizo de Tamadaba y Tirma, y los de los Moriscos, además de los palmerales de la cuenca de Tirajana y Fataga, los almendros y matorrales de leguminosas del barranco de la cuenca de Tejeda y la interfaz urbano-forestal de medianías del norte.

A ellas se unen las Zonas de Medio Riesgo Forestal (ZMRI), que tienen una superficie global de 3.415 hectáreas y que, en su mayoría, se reparten por las medianías de la Isla, entre los municipios de Agaete, Agüimes, Artenara, Arucas, Firgas, Gáldar, Santa María de Guía, Ingenio, Las Palmas de Gran Canaria, Moya, San Brígida, San Mateo, Telde y Valsequillo.

Un amplio dispositivo y campañas de concienciación

Para describir el dispositivo general con el que se hace frente a las tareas de vigilar, prevenir y extinguir los incendios forestales, el documento ahonda en el catálogo de los medios y recursos disponibles y de las infraestructuras existentes, e indica las medidas preventivas que se llevan a cabo, la regulación de usos y prohibiciones, y la planificación para el ámbito local.

A este respecto, en el catálogo de medios y recursos disponibles se encuentran la Unidad Operativa de Fuegos Forestales (UOFF), compuesta por los equipos helitransportados (Presas), las brigadas terrestres, las patrullas, el técnico director de Emergencias, el director de extinción, el técnico de planificación, operaciones y logística, el analista de incendios, la Brigada de Investigación de Incendios Forestales (BIIF), los agentes de Medio Ambiente del grupo de extinción (BRIEX), los gestores del Centro de Coordinación de Incendios (Cecopin), los encargados de logística, el personal de abastecimiento y almacenes, los vigilantes de incendios y la Brigada Cernícalo (Bricer), habilitada para operar con drones. A ello se suman el Consorcio de Emergencias de Gran Canaria, las agrupaciones de Protección Civil y los bomberos municipales.

En el capítulo de infraestructuras, enumera las de la Consejería de Medio Ambiente del Cabildo de Gran Canaria, las municipales y las autonómicas presentes en la Isla, entre las que están las de uso público, como áreas recreativas, zonas de acampada, aulas de la naturaleza, miradores y refugios, entre otros, además de la red viaria. Del mismo modo, hace referencia a los puntos de agua (hidrantes, depósitos, balsas, embalses y estanques), las helipistas y pistas de aterrizaje para aeronaves, las bases operativas y las centrales de coordinación, como el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes), el ya citado Cecopin y el Centro de Coordinación Operativa Municipal (Cecopal).

Finalmente, dedica un apartado a las medidas de prevención que se acometen desde el Cabildo, tales como los trabajos preventivos en el ámbito agrícola, el programa ‘Gran Canaria Pastorea’, las quemas prescritas, los tratamientos mecánicos de desbroces, claras, clareos y podas, los aprovechamientos forestales y la vigilancia e inspección preventiva de actividades de riesgo. Y concluye este apartado con las acciones de concienciación y sensibilización, entre las que alude a la estrategia ‘Gran Canaria Mosaico’, con la campaña ‘Hablamos de incendios’, los stands en ferias, las actividades en colegios, la web de prevención de incendios forestales www.grancanariamosaico.com, la Infografía Interactiva sobre Autoprotección, la publicación ‘Gran Canaria y la prevención de incendios forestales’, la iniciativa ‘Mayo: Mes de la prevención de incendios forestales’, la celebración del Día del Bombero Forestal, los Premios Gran Canaria Mosaico, la edición de vídeos de Maestro Florido y la campaña ‘Proteger Gran Canaria está en nuestras manos’.

Uno de los coordinadores de estos equipos acude durante 15 días como parte de una delegación de asesoramiento y colaboración del Mecanismo Europeo de Protección Civil, conocida como FAST y coordinada por el MITECO

El Gobierno boliviano solicita apoyo internacional ante la magnitud de los incendios forestales que se están desarrollando en el país

Uno de los coordinadores del equipo EIRIF (Equipos de Intervención y Refuerzo en Incendios Forestales), Abraham Hernández, acude como parte de una delegación española de 49 personas a Bolivia para prestar apoyo y asesoramiento a su gobierno, ante la grave situación de incendios forestales que sufre el país.

El Gobierno de Bolivia ha solicitado este apoyo internacional debido la existencia de más de 3.000 focos activos y casi 4 millones de hectáreas calcinadas, lo que ha llevado a la suspensión de las quemas controladas en el territorio. Durante 15 días este equipo de expertos brindará asesoramiento sobre el comportamiento, análisis, tácticas y estrategias para la extinción de los incendios forestales activos, además de la prevención a futuro.

Dicha colaboración, de gran relevancia, refuerza la importancia de la cooperación entre países para enfrentar emergencias climáticas y ambientales de gran escala.

El viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes y delegados de la Unión Europea recibieron al contingente en el Aeropuerto Internacional de Viru Viru, en Santa Cruz de la Sierra, la región más poblada y más golpeada por el fuego desde junio

El equipo en cuestión, conocido como FAST (Forest Fires Assessment and Advisory Team), es una iniciativa internacional coordinada por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico de España, formado por especialistas en incendios forestales pertenecientes a administraciones y organismos regionales y nacionales. Su objetivo es proporcionar apoyo y asesoramiento en emergencias relacionadas con incendios activos o en la planificación y prevención de los mismos.

Esta acción se enmarca dentro del programa de colaboración internacional del Mecanismo Europeo de Protección Civil (UCPM), coordinado por la Dirección General de Operaciones de Protección Civil y Ayuda Humanitaria (DG ECHO) de la Comisión Europea. Una herramienta que se activa en aquellos países que necesitan apoyo en situaciones de emergencia y desastres naturales. Este mecanismo abarca tanto acciones dentro del ámbito europeo como fuera del mismo.

Estará especialmente activo durante los días de la peregrinación a Candelaria y en otras fiestas que generen concentración de personas en zonas próximas al monte

El dispositivo de prevención y extinción cuenta con 32 drones y 18 medios aéreos tripulados, 1.450 efectivos y 174 recursos terrestres

Gobierno, cabildos y ayuntamientos colaboran estrechamente para detectar rápidamente cualquier conato o conducta sospechosa

Canarias ha puesto en marcha un amplio dispositivo de vigilancia aérea contra los incendios forestales gracias a la estrecha colaboración entre el Gobierno de Canarias, los cabildos insulares y ayuntamientos, lo que permitirá detectar rápidamente cualquier conato, situaciones de riesgo o conductas sospechosas que puedan desatar un incendio forestal y actuar al mismo tiempo como elemento disuasorio ante posibles negligencias.

Este dispositivo estará especialmente activo durante los días de la peregrinación a Candelaria con motivo de las Fiestas en honor de Nuestra Señora de Candelaria, en todos aquellos eventos que generen una concentración importante de personas en zonas próximas al monte y en las situaciones de alerta por altas temperaturas y riesgo de incendios forestales decretadas por el Gobierno de Canarias.

Este plan de vigilancia aérea, coordinado por la Dirección General de Emergencias, cuenta con 32 drones que vuelan por diferentes lugares de las islas, de los cuales veinte son tripulados por personal del Gobierno de Canarias, doce pertenecientes a los Equipos de Prevención y Extinción de Incendios Forestales (EIRIF) y ocho a la Dirección General de Emergencias, y otros doce son gestionados por los cabildos insulares de Tenerife, Gran Canaria, La Gomera, El Hierro y La Palma. A estos 32 drones hay que sumar los que aportan las diferentes corporaciones locales.

A ellos se unen los ocho helicópteros de que dispone el Gobierno de Canarias, seis pertenecientes al Grupo de Emergencias y Salvamento (GES) y dos a los EIRIF, que realizan también labores de vigilancia activa y reconocimiento de masas forestales al disponer de cámaras duales que permiten captar imágenes en tiempo real y térmicas, lo que da una información muy precisa de donde deben actuar los equipos de extinción.

Estos recursos se suman a otros diez medios aéreos tripulados, -cuatro helicópteros pertenecientes a los cabildos y otros seis a la Administración del Estado- que están operando en Canarias y a los 1.450 efectivos y 174 recursos terrestres destinados para esta lucha contra los incendios forestales.

El objetivo de este dispositivo es reforzar las tareas de vigilancia que ya se realizan desde tierra y detectar cuanto antes los posibles conatos que se produzcan o las actividades sospechosas que puedan generar un incendio y comunicarlas, de manera inmediata, al Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (CECOES) 112.

Se trata de una apuesta por extender la red de vigilancia y seguimiento ante un verano marcado por la intensa sequía vivida en los últimos años en el Archipiélago y a las condiciones actuales de alto riesgo de incendios. Una situación que llevó a activar desde el pasado 18 de marzo la prealerta por riesgo de incendio forestal en Gran Canaria, Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro.

Ante la situación especialmente delicada por la ausencia de lluvias durante el pasado invierno y la previsión de la llegada de altas temperaturas, se suma al despliegue de medios la puesta en marcha de medidas extraordinarias como el posicionamiento de balsas portátiles que se han ubicado en las cinco islas con riesgo de incendio forestal. Estas balsas sirven para llevar agua a zonas donde no existan puntos de recarga para medios aéreos y disponen de 56.000 y 25.000 litros de agua. Tienen un diámetro de seis y cuatro metros, respectivamente, una altura de 1,7 metros y están construidas en PVC. Esta iniciativa ya se probó con éxito el pasado 18 de abril en los montes de Candelaria, en Tenerife, y el 18 de junio en los Pinos de Gáldar, en Gran Canaria.

Además, en esta campaña se incorpora un nuevo vehículo ligero como Puesto de Mando Avanzado (PMA) para la gestión de crisis de protección civil y emergencias, que se suma al otro PMA ya existente. Este nuevo vehículo 4×4 cuenta con los últimos avances tecnológicos y está equipado de un sistema de comunicaciones vía satélite, que le permite la conexión permanente con el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (CECOES 112) a través de audio, imagen y datos. Cuenta además con un sistema integrado de drones con capacidad de retransmitir en directo imagen y audio.

Un refuerzo conjunto entre todas las administraciones encaminado a frenar los riesgos existentes y a mejorar la acción de la lucha contra los incendios forestales en las Islas.

Se suman a los ocho helicópteros que además de las labores de extinción realizan vigilancia activa y efecto disuasorio

Este fin se semana se eleva a alerta el riesgo de incendios forestales en las islas occidentales y Gran Canaria

Se declara situación de prealerta por temperaturas máximas en Tenerife, La Gomera, El Hierro y Gran Canaria

El Gobierno de Canarias, en su campaña de prevención de incendios forestales, refuerza la vigilancia aérea de los montes con la incorporación drones que se suman a los ocho helicópteros que además de las labores de extinción realizan vigilancia activa y efecto disuasorio.

El objetivo de estos drones es detectar situaciones de riesgo o imprudencias que puedan provocar un incendio forestal, en un momento en el que los altos índices de sequía acumulada, la disponibilidad de combustible y las altas temperaturas aumentan el riesgo de incendios forestales en Canarias.

Pese a que las temperaturas, según la previsión meteorológica no van a experimentar una subida extrema este fin de semana, continuarán siendo altas, por lo que el Gobierno de Canaria eleva a alerta el riesgo de incendios forestales en las islas occidentales y Gran Canaria, a partir de mañana sábado 10 de agosto.

Esta decisión se adoptó, esta mañana, en la reunión técnica del Plan Especial de Protección Civil y Atención de Emergencias por Incendios Forestales (INFOCA), coordinada por director general de Emergencias, Fernando Figuereo, en la que se han valorado los diferentes aspectos meteorológicos a los que se enfrenta el archipiélago en los próximos días.

En esta comisión de expertos, constituida de manera preventiva por el Gobierno de Canarias, desde el pasado mes de marzo, para realizar una monitorización permanente de la evolución del riesgo de incendios en las islas participan todos los cabildos insulares, los sectores implicados en la extinción de un incendio, representantes de la Administración del Estado, la Unidad Militar de Emergencias (UME), los cuerpos y fuerzas de seguridad y la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).

A esta alerta por riesgo de incendios forestales se suma la declaración de la prealerta por temperaturas máximas en Tenerife, La Gomera, El Hierro y Gran Canaria, también a partir de mañana.

La previsión meteorológica indica un episodio de altas temperaturas que afectará a las medianías, las zonas altas y cumbres, especialmente de las vertientes este, sur y oeste de las islas, con unas máximas que probablemente alcanzarán y superarán los 32ºC en las islas occidentales y los 36ºC en Gran Canaria. Además, se espera una ligera calima en altura y una humedad relativa inferior al 30 % a altitudes superiores a los 800 metros y a partir de los 400 metros en la vertiente sur de Gran Canaria.

Ante la situación de sequía meteorológica de largo plazo y el alto estrés hídrico de la vegetación, la Dirección General de Emergencias recuerda que es imprescindible reducir el riesgo con restricciones, por lo que la ciudadanía debe respetar las limitaciones establecidas por los diferentes cabildos, tanto en lo referido al acceso y la suspensión de actividades lúdicas programadas en zona forestal, en unos días donde aumenta el tránsito personas en estas zonas.

Además. la Dirección General de Emergencias realizará un continuo seguimiento de la situación meteorológica y evaluará la próxima semana los nuevos parámetros para determinar el nivel de riesgo.

Recomendaciones para la población

El Gobierno de Canarias, ante el persistente riesgo de incendio forestal, insiste en la importancia de las medidas de prevención que debe adoptar la población, tales como no tirar colillas encendidas, ni fósforos en zonas arboladas, así como evitar dejar desperdicios. Además, recalca que ante la primera señal de humo en zona de monte se debe llamar inmediatamente al 112, ya que el tiempo de reacción por parte de los servicios de emergencias es clave para evitar que el incendio de propague sin control.

Con el objetivo de proteger las viviendas es importante mantener una franja limpia y libre de vegetación seca y residuos a su alrededor, así como en las parcelas que están sin edificar.

En cuanto al almacenamiento de combustibles, hay que depositarlos en lugares ventilados y protegidos, y evitar la acumulación de materiales secos en cobertizos, toldos o ventanas.

Ante las altas temperaturas, el Gobierno de Canarias recomienda a la población que tome las precauciones necesarias como evitar salir a la calle y, si lo hace, lleve una gorra o sombrero y utilice ropa ligera, de colores claros y que no sea ajustada. Además, eluda hacer ejercicios físicos intensos en las horas centrales del día, permaneciendo en lugares frescos, bebiendo mucho líquido y protegiéndose del sol en el exterior. Se debe tener especial cuidado con las personas mayores y los menores, que son más vulnerables a estos episodios de calor intenso.

El consejero de Política Territorial, Manuel Miranda, confirma que se estudian nuevos sistemas para mitigar la falta de agua a la que nos podemos enfrentar en los próximos meses

Las balsas portátiles permiten aumentar las frecuencias de las descargas y el uso de retardantes desde los helicópteros

El Gobierno de Canarias está probando el uso de balsas portátiles para abastecer los helicópteros que habitualmente participan en la extinción de incendios forestales, con el objetivo de mitigar la escasez de agua producida por la sequía, intensificar la frecuencia de las descargas e incorporar el uso de retardantes en las misiones de estas aeronaves. Así lo confirmó esta mañana el consejero de Política Territorial, Manuel Miranda, tras asistir a una prueba de estos nuevos componentes en los montes de Candelaria, en la isla de Tenerife.

“Sufrimos el peor período de sequía desde que hay registros, hemos pasado el invierno más seco y cálido desde que hay estadísticas, y nos preocupa no disponer de agua suficiente de aquí al verano en las charcas y balsas de las islas para abastecer a los helicópteros que usamos en la extinción de incendios forestales, por eso estamos estudiando nuevos sistemas que garanticen el abastecimiento de los medios aéreos llegado el caso, es el momento de prevenir y de tener los deberes hechos antes de que sea tarde”, aseguró el máximo responsable de emergencias, Manuel Miranda.

Con este objetivo, la Consejería de Política Territorial, Cohesión Territorial y Aguas del Gobierno de Canarias ha desarrollado unas jornadas de formación para probar el uso de estos nuevos elementos en la lucha contra incendios forestales, organizadas por la Dirección General de Emergencias y dirigidas a personal del Gobierno de Canarias y de los cabildos insulares, con el objetivo de mejorar la coordinación y aumentar la eficacia de los recursos durante los trabajos de extinción de incendios en las Islas. La formación está dirigida al personal que interviene ante estas situaciones, como por ejemplo el servicio de equipos de intervención y refuerzo en incendios forestales (EIRIF).

Las jornadas han consistido en sesiones teóricas y prácticas, incluyendo un ejercicio de prueba realizado esta mañana en la zona de Chivisaya, en el sur de la isla de Tenerife, donde se han usado nuevos retardantes lanzados desde un vehículo equipado con un equipo motobomba y desde mochilas extintoras. Los retardantes son compuestos químicos que, mezclados con el agua que se lanza a las llamas, permiten rebajar y parar el frente del incendio, así como reducir la velocidad de su propagación al actuar en materiales que aún no han sido afectados, permitiendo que se consuman de forma mucho más lenta.

La formación para el uso de estos elementos permite a los equipos de lucha contra los incendios forestales conocer mejor su composición, su forma de actuar y cómo se maneja y se aplica durante las tareas de extinción para que resulte más eficaz su uso.

Respecto a las balsas portátiles, se trata de dos depósitos neumáticos que sirven como puntos de recarga de agua para helicópteros que estén participando en la lucha contra el fuego, y acaban de ser adquiridas por el Gobierno de Canarias. La formación para su uso ha incluido la forma de instalación, así como el recordatorio a los operarios de los requisitos para su ubicación. En la prueba de campo celebrada hoy en la misma parcela ha participado el helicóptero MI41 y se ha procedido a llenar una de las balsas, de 56.000 litros de capacidad, para que el citado medio aéreo pudiera hacer la carga del depósito de agua que lleva incorporado, denominado bambi.

Las dos balsas portátiles servirán para llevar agua a zonas donde no existan puntos de recarga para medios áereos y disponen de 56.000 y 25.000 litros de agua. Tienen diámetro de 6 y 4 metros, respectivamente, una altura de 1,7 metros y están construidas en PVC.

Cabe recordar que el consejero de Política Territorial, Cohesión Territorial y Aguas del Gobierno de Canarias, Manuel Miranda, firmó en el mes de marzo la declaración especial de prealerta del Plan Canario de Protección Civil y Atención de Emergencias por incendios forestales (Infoca), ante el elevado riesgo que presentan los montes de las islas como consecuencia de la prolongada sequía y las elevadas temperaturas.

Esta prealerta permanecerá vigente mientras se den las condiciones que mantienen alto el riesgo de incendios, y fue fruto de una recomendación del equipo de expertos constituido a tal efecto, integrado por especialistas en emergencias, climatología y extinción de incendios, como Federico Grillo, Montse Román, Miguel Ángel Martín, Vicky Palma y Pedro Martínez.

El viceconsejero de Cohesión Territorial y Aguas, Marcos Lorenzo, participó en una reunión técnica para coordinar las actuaciones derivadas del Plan Especial de Protección Civil y Atención de Emergencias por Incendios Forestales en Canarias

El viceconsejero de Cohesión Territorial y Aguas del Gobierno de Canarias, Marcos Lorenzo, ha mantenido un encuentro técnico de coordinación con especialistas del Gobierno de Canarias y los cabildos insulares para estudiar las condiciones de la activación preventiva del Plan Especial de Protección Civil y Atención de Emergencias por Incendios Forestales en Canarias (INFOCA).

El elevado e inusual riesgo de incendios forestales que padece Canarias en esta época del año, debido a las elevadas temperaturas y al descenso de la humedad, ha llevado al gobierno autonómico a convocar a las instituciones para diseñar una estrategia que permita, desde la prevención y planificación, abordar un posible incendio forestal en menor tiempo para evitar mayores consecuencias.

En la reunión participaron las áreas de Protección Civil y de Gestión Forestal de los cabildos insulares, los Equipos de Intervención y Refuerzo en Incendios Forestales (EIRIF), la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) y el Servicio de Protección Civil y Atención de Emergencias del Gobierno de Canarias.

El viceconsejero, Marcos Lorenzo, anunció que el Gobierno tendrá en cuenta las aportaciones de cada cabildo insular para tomar las medidas preventivas necesarias ante el fenómeno de los incendios forestales en Canarias.

El consejero de Política Territorial, Manuel Miranda, anuncia en el Parlamento la inminente activación preventiva del INFOCA, y la constitución de un comité técnico asesor para monitorizar la evolución de la situación

En lo que va de año se han producido diez conatos de incendio, y los índices de riesgo marcan peligro extremo por la sequía en capas profundas

El consejero de Política Territorial, Cohesión Territorial y Aguas del Gobierno de Canarias, Manuel Miranda, ha anunciado hoy que su departamento estudia un plan de medidas extraordinarias para hacer frente al elevado riesgo de incendios forestales que sufre el archipiélago, y se mostró partidario de adelantar la campaña anual de prevención, ante los efectos que la sequía está ocasionando en los montes de las islas.

El anómalo invierno ha provocado que en lo que va de año se hayan producido ya diez conatos de incendios, y los índices de riesgo marcan peligro extremo por la pertinaz sequía en capas profundas del suelo. Estas circunstancias han llevado a los expertos consultados por el Gobierno a recomendar la activación preventiva en fase de prealerta del Plan Especial de Protección Civil y Atención de Emergencias por Incendios Forestales (INFOCA), como respuesta a una “situación meteorológica extraordinaria, que requiere de medidas extraordinarias”, según explicó el consejero y responsable de Emergencias.

Manuel Miranda ha comparecido en Comisión Parlamentaria para explicar las medidas que está tomando el Gobierno para preparar al archipiélago ante la posibilidad de sufrir incendios forestales fuera de capacidad de extinción. El consejero ha añadido, además, que se está constituyendo un grupo de apoyo técnico conformado por especialistas de reconocido prestigio profesional, que “nos permita, no solo diseñar políticas que mejoren la respuesta a los incendios, sino hacer un seguimiento constante de la actual situación y tomar decisiones durante las propias labores de extinción, si fuera necesario”.

El titular del área de Emergencias ha puesto sobre la mesa la situación meteorológica que vive Canarias desde hace algunos años, con una persistente sequía que coincide con “la aparición de nuevos tipos de incendios y la transformación de la fórmula para evitarlos y, en el caso de que se produzcan, combatirlos”.

El consejero ha recordado que, según datos de la AEMET, enero de 2024 ha sido el mes de enero más cálido desde que se tienen registros en Canarias, desde 1961. En este periodo, la temperatura media ha aumentado en 3,1ºC; la temperatura máxima, en 3,6ºC; y la temperatura mínima ha subido 2,7ºC.

Manuel Miranda ha señalado además que en este mes de enero ha llovido solo un 13% respecto a la media de años anteriores, y que “desde 2022 se suceden las anomalías por calor y la falta de lluvias, con ocho olas de calor y episodios de elevadas temperaturas”. Los índices que muestran la gravedad de la sequía, de acuerdo con la humedad del suelo, “son negativos en todas las islas desde hace años” y “los análisis respecto a los próximos meses nos dicen que esta situación no va a mejorar”, con un 70% de probabilidades de que la temperatura media sea más alta y un 40% de posibilidades de que llueva menos de lo normal en estos meses.

Manuel Miranda ha recordado que “el calentamiento global agrava la evolución de los incendios hacia incendios más peligrosos, rápidos e incontrolables, fuera de la capacidad de extinción, con un comportamiento diferenciado”, lo que se suma a que “el verano actual abarca cinco semanas más que a comienzos de los años 80, se diluyen las estaciones de transición (primavera y otoño) y aumenta el periodo de máximo riesgo de incendio forestal durante más meses del año”.

“El pasado día 24 de enero”, ha recordado Miranda, “se declaró por primera vez en este mes una prealerta por incendios” y en lo que llevamos de año se ha intervenido en diez conatos de incendios.

Esta situación, a juicio de Manuel Miranda, obliga a estudiar medidas extraordinarias actualmente en estudio, para adelantar con los Cabildos la aprobación de los planes anuales para la prevención, vigilancia y extinción de incendios forestales, o solicitar al Ministerio de Transición Ecológica el urgente posicionamiento en las Islas de los medios aéreos antiincendios que normalmente están operativos en época de riesgo alto que, en la situación que vivimos, “se extiende ya en todo el año”.