Recorrido guiado de la artista M. Nieves Cáceres por su exposición ‘Deshilar la colección. Urdimbres de lo sagrado. Tramas que des(a)nudan amarres’

Quién mejor para desentrañar los ‘tejidos’ secretos de su obra que la propia artista. M. Nieves Cáceres, creadora multidisciplinar y poeta lanzaroteña, propone un recorrido guiado a través de su muestra ‘Deshilar la colección. Urdimbres de lo sagrado. Tramas que des(a)nudan amarres’, un ambicioso proyecto artístico que expone en la Casa de Colón, hasta el próximo 5 de mayo. La cita, enmarcada en el ciclo ‘Miradas a la exposición’, está fijada para el día 20 de marzo, a las 19:00 horas. La entrada es libre y gratuita, hasta completar aforo

Desde la veneración de lo divino y lo humano, la muestra, basada en el concepto del cuerpo, desde tres vertientes, hace contrastar la imaginería religiosa con la biodiversidad de la naturaleza. Se trata de una exposición que aúna la imagen, la literatura y la acción poética, en vinculación con diez piezas pertenecientes a la colección artística de la Casa de Colón. Su autora, M. Nieves Cáceres, artista multidisciplinar lanzaroteña, confronta su trabajo artístico con obras del siglo XVI al XVIII, o incluso a través de piezas precolombinas, con las que rompe el tiempo lineal propio de la Historia del Arte desde el lenguaje poético.

Programación paralela

La muestra se complementa con las habituales sesiones de ‘Miradas a la exposición’, que arrancan el día 20 y que desgranarán algunas de las piezas más destacadas, de la mano de la propia artista y del escritor Nilo Palenzuela. Pero también está prevista la celebración de una jornada de teatro familiar, de un programa educativo que permita a los centros escolares la posibilidad de adentrarse en este espacio, un taller para mujeres vinculado a los textiles que permitan ‘tejer historias’, y una performance, ‘Flor del mediodía’, con la que culminará la exposición.

Sobre la propuesta

Teniendo presente el refrán “por el hilo se saca el ovillo”, M. Nieves Cáceres es una artista inquieta, también poeta y activista por los derechos de las mujeres, que busca indagar en los nudos de la tradición del legado artístico. Así se producen diálogos inesperados, al contrastar Antigüedad, Edad Media, o Moderna con arte Contemporáneo.

En ‘Deshilar la colección.Urdimbres de lo sagrado: tramas que des(a)nudan amarres’, la autora se fundamenta, no solo en el cuerpo como soporte de creación, desde la performance, la videoacción y la fotografía, sino que también se nutre de la palabra escrita y la instalación o la poética de los objetos, donde los nudos y las telas cobran una presencia relevante, con sentido metafórico. Abarcando el concepto de lo identitario, la iniciativa abarca desde la experiencia personal al contexto cultural, como fenómeno abierto de una comunidad en continua evolución.

Los temas que se conceptualizan en este diálogo con diez piezas seleccionadas de la propia colección del museo, abarcan la santería, la colonización, la brujería, el lenguaje, o la negritud, entre otros, cuestionando el papel de las mujeres en cada uno de estos campos.

“La propuesta se fundamenta en abarcar la temática de lo sagrado desde distintos enfoques”, trata de explicar esta creadora multidisciplinar. “No solo desde una conceptualización religiosa, la cual se toca de manera crítica o irónica, sino abordando el sincretismo de lo religioso-espiritual, al plantear opciones como el animismo, o el mundo de lo onírico como una opción vinculada al surrealismo pero también al origen, a los rituales de iniciación o a las visiones, por ejemplo”, argumenta.

De Venus a Goya

“Mi intención, desde el principio, era buscar un diálogo con obras de la colección de la Casa de Colón, lo cual ha resultado muy gratificante porque, si bien tenía claro el crear nexos con algunas obras concretas, otras han sido sugerencia del propio equipo del museo al ver algunas de mis piezas, dado el conocimiento exhaustivo que mantienen del legado que custodian”. Así, por ejemplo, surge la circunstancia de que las piezas ‘La bruja’, o ‘Confesa’, donde se bordan en tela nombres de mujeres que fueron procesadas durante la Inquisición en Canarias, dialoguen con un grabado de Goya, concretamente uno de sus aquelarres , ‘Disparate ridículo’ (1875). “¡Todo un lujo!”, exclama Cáceres.

Son 19 obras propias de la artista, más otras 10 de la colección, que ocupan las tres salas de exposición temporal del Museo, divididas bajo la premisa conceptual de: Cuerpo sagrado, Cuerpo onírico y Cuerpo de fe, lo cual encaja muy bien en lo que podría interpretarse como una “naturaleza trinitaria”, a juicio de su creadora. A través del lenguaje poético, y con la intencionalidad de romper el tiempo lineal de la Historia del Arte, tan pronto una pieza precolombina, como la Venus Valdivias, de la Cultura Valdivia (Ecuador), fechada en 3500 - 1500 a.C., dialoga con una fotografía, como un plotter sobre tela lo hace con una tabla flamenca del siglo XVI, ‘La Magdalena penitente’ de Maestro del papagayo (1545-1550). El objetivo es así “contrastar Antigüedad, Edad Media o Moderna con propuestas contemporáneas”.

Su proyecto artístico abarca la temática de lo sagrado, contrastando la imaginería religiosa con la biodiversidad de la naturaleza. El nexo viene a ser el cuerpo, las relaciones que establecen los seres vivos entre sí y con lo que les rodea, ya sea la propia naturaleza o el cosmos, desde una valoración del ser humano como un ser vivo más, sin creerse el centro del mundo. “Se está buscando romper con el predominio de una mirada europea colonial y dar espacio a otros códigos posibles, en igualdad de condiciones, desde una mirada de la sociología del cuerpo, a la que alude David Le Breton, donde se valora el cuerpo como una falsa evidencia y no como un todo inequívoco, sino desde una elaboración social y cultural. De ahí que gran parte de mi imaginario gire en torno a la isla de Lanzarote y que la vinculación del campesinado con la tierra siempre me haya parecido algo sagrado”, aclara Cáceres. “Una pieza que se aproxima muy bien a ese binomio es la denominada ‘Flor de mediodía’, realizada, justamente, en Lanzarote, donde me dediqué a buscar barrilla o cosco, plantas rastreras, por la costa sur de la isla, para luego excavar un hoyo en el rofe de un arenado, con las dimensiones de mi estatura, y cubrir el mismo con las plantas, extender una sábana blanca y presionar después mi cuerpo con intención de lograr una especie de grabado performativo o estampación, a modo de sábana santa o sudario, cuyo resultado último, sin menospreciar todo el proceso que fue, en verdad, lo más interesante, es una imagen desdibujada sobre tela, una mancha que podría hacer referencia al mito de lo femenino ancestral, cual metáfora de nacimiento y muerte”.

Trayectoria de M. Nieves Cáceres

Macarena Nieves Cáceres es una artista y escritora nacida en Lanzarote. Cursó sus estudios universitarios en la Universidad de La Laguna. Vive y trabaja en Las Palmas de Gran Canaria. Su trabajo artístico se vincula a la poesía visual, a la acción fotográfica, a la escritura, así como a la performance y a la acción feminista.

Pertenece al equipo promotor y editor de la revista ‘Al-harafish’ desde 1997, desde donde coordina la edición poética ‘Al-harafishedita’ desde 2004. Colabora también con el grupo de profesionales ‘Artemisia: Mujeres + Arte’. Ha participado en diferentes proyectos de formación y residencias artísticas sobre ‘Mujeres y Desarrollo en México’ (1997) y en ‘Madrid y Nicaragua’ (1998-1999). Desde 1992 viene publicando poemas y relatos en revistas literarias y suplementos culturales.

Sus últimas exposiciones artísticas individuales han sido ‘En orbes de rofe. Localistmos’, en la Casa de los Coroneles de Fuerteventura en 2017; ‘Acaso dije casa; la estirpe como delirio’ en S/T Espacio Cultural de Las Palmas, en 2013, ‘Quién acecha tu memoria’ en la Galería Webes-Lutgen de Sevilla, en 2012, o ‘Corpus de Ausencia’, de Gran Canaria Espacio Digital en 2012. También ha formado parte de exposiciones colectivas, siendo sus últimas participaciones ‘Cándido-Cándice. Centenario de Leonard Berstein’, del CAAM en Las Palmas en 2018 o ‘Cinco creadoras en busca de Arozarena’, del CIC El Almacén en 2017.

Como escritora, se caracteriza por crear un discurso poético propio y denso en torno a conceptos como isla, cuerpo, mujer, deseo, identidad o memoria como. Ha publicado ‘Me declaro difunta’ (2002), ‘La prueba vital’ (2003), ‘De amor y locura’ (2004), ‘Fluidos de jade’ (2005), ‘Hablo jable’ (2005), ‘Lo que la tierra alberga’ (2005), ‘Decir solo’ (2015), ‘Mater sombras’ (del origen) (2015) o ‘Gravitan agujas’(2020), entre otros. Entre sus libros de acción visual destacan ‘Esclavas para María’ (2002) y ‘Soy la isla’ (2004). Su último poemario es ‘Aquellar de la lluvia’, presentado en 2022 en la Casa de Colón.