
La popular y veterana emisora de radio "Radio faro del Noroeste" sigue su proyección hacia una mayor ampliación de su cobertura.
El movimiento que atraviesa Europa desde los países del este hasta el Peñón de Gibraltar, debería hacernos reflexionar sobre lo que sucede en la agricultura europea en toda su amplitud, ya que mucha razón los agricultores pequeños y medianos, no quiere decir esto que la tengan toda, y puede que en algunas de sus reivindicaciones, no la tengan en absoluto, si bien es cierto que las directrices de Bruselas no tienen en mucho de los casos ni pies ni cabeza, como también es cierto, que las organizaciones agrarias no han cumplido con la misión que tenían y tienen como razón principal de su existencia, y que ha supuesto la pérdida de su credibilidad ante una gran parte del sector, precisamente los más desfavorecidos, el pequeño, mediano y la agricultura familiar, que precisamente son los que primero y mas sufren cualquier tipo de crisis por pequeña que está sea
Tienen toda la razón en la diferencia de precios existentes entre origen y consumidor, la diferencia entre lo que se cobra y a como se vende en los lineales, la competencia desleal de la entrada de productos de de terceros países que tienen tres diferencias destacadas, la falta de inspección fitosanitaria en puertos y aeropuertos, para que el consumidor esté seguro de que come seguro por consiguiente salud, los salarios en los países de origen, que es lo que eleva el nivel de vida y desarrollo de esos países, y un control de las empresas que se dedican al reetiquetado de productos no europeos, haciéndolos pasar como producidos en territorio europeo. Ese control entiendo que debería ser doble, a las empresas que lo hacen, pero también a las que los distribuyen y a las que los ponen en los lineales, que suelen ser las grandes cadenas de supermercados.
El tema de precios es algo imprescindible para poder mantener una soberanía alimentaria que debería ser imprescindible para cualquier estado, como principal necesidad para no verse como se vivió en la Europa de la posguerra.
Mucho ha cambiado la comercialización con la llegada de las grandes superficies para el pequeño, mediano y la agricultura familiar. A lo anterior hay que unirle en los tiempos que corren, la llegada de los fondos de inversión al sector, con lo cuál todo cambia. Ni a las grandes superficies, ni a esos fondos les importa de verdad la agricultura, sólo les importa la cuenta de resultados. Por eso ha cambiado y mucho el sector primario. A las grandes superficies no les interesa comprar nada más que a los más baratos, t eso sólo lo pueden hacer los grandes terratenientes entre los que se encuentran los fondos de inversión. La gran superficie no contrata ni llega acuerdos con los pequeños, ellos se aseguran buenos precios y acuerdos a más de un año, y alguna que otra compran frutas y verduras de temporada imponiendo sus precio, que siempre estarán por debajo de costos de producción. Pero quienes les pueden dar precios muy baratos, los grandes y las grandes inversiones de los fondos de inversión, ya que a ellos el precio de la producción les sale mucho más barato.
Ese es uno de los motivos junto al error de Bruselas de cambiar soberanía alimentaria por convenios con terceros con la gran influencia de los lobistas, para vender productos que no se comen y que encima contaminan.
Con el canto de sirena para unos pocos del libre mercado, se ha incluido todo. Un error que sino se cambia pronto, será el hambre de muchos y la riqueza de unos pocos, ya que cuando esos pocos se hagan con todo el mercado, los más que menos tienen pasarán hambre. Cosa que ya está sucediendo en cada vez más porcentaje de la población.
Otro de los elementos que está sucediendo, es el cambio del valor nutrición al por el valor de producción, y lo bonito que tiene que estar el producto en el lineal, todo tiene que ser igual y del mismo color aunque no tenga la calidad alimentaria que debería. Con eso hemos también perdido y por consiguiente dejado en manos de unas pocas multinacionales, lo más necesario para la producción, LAS SEMILAS, hoy en día salvo raras excepciones, los agricultores se han ido quedando sin las semillas aclimatadas durante miles de años a su zona de producción, ahora como digo hay que comprarlas al menos en Europa a esas pocas multinacionales. Pongo un ejemplo, la investigación más adelantada del tomate está en Israel, pero la producción de esa semilla, está en La India, el kilo de semilla oscila entre 60 mil euros la más barata y los 400 mil la más cara, ese trabajo de producción de semilla lo hacen mujeres con doce horas de trabajo y 90 euros al mes de salario.
Pero es la ley del libre comercio, libre para unos pocos, esclavo para muchos.
Por todo lo anterior y más, tiene razón los agricultores, pero eso no quiere decir que la tengan en todo lo demás que se cuela entre sus reivindicaciones.
Últimamente se dejan llevar mucho por esos cantos de sirena que llegan desde los que están contra la democracia, aunque gracias a ella, los mismos pueden decir lo que quieran, aunque lo que les gustaría si llegan al poder es prohibir, reprimir, e imponer nuevamente el pensamiento único, es decir, cercenar la libertad de los que no piensen como ellos, la Europa de hoy ya tuvo la experiencia en el siglo pasado que terminó con millones de muertos con las dictaduras tanto fascistas, nazistas como estalinistas, y que aunque queda mucho por hacer, en beneficio de la democracia, no debería el sector primario dejarse llevar por la ultraderecha, sus hechos que están en la historia, no son precisamente lo mejor que les puede suceder al sector primario, su negacionismo al cambio climático debería ser motivo de una profunda reflexión. El planeta no es de unos pocos, es el hogar de todos y de los que vienen detrás de nosotros y como tal debemos de tratarlo, no sólo se puede decir, que en el sector están los mayores ecologista, estaremos faltando a la verdad, y sólo una muestra en Europa, miremos hacia España, aquí tenemos el Mar Menor y Doñana, que precisamente por ser parajes únicos, no son precisamente un ejemplo del sector en el resoeto al medio natural.
No podemos negarnos a la evidencia del cambio climático, negarlo es negar el futuro de los que vendrán, lo mismo que no toda la agricultura pude ser de regadío, hacer eso sería demostrar una falta de respeto al medio que decimos querer vivir de él. Unos de los problemas de la vida que se empieza a contenplar ya y que se irá padeciendo con más vitulencia en el futuro será el de la falta de agua, en eso tenemos que reflexionar, no se puede plantar todo y de todo y vaya por delante un ejemplo, para producir un kilo de aguacates necesitamos 800 litros de agua, y me pregunto, ¿ tenemos suficiente agua para plantar miles de hectáreas? La cartera dirá que si, pero si ahondamos un poco en la conciencia individual en beneficio de pasar de lo mío a lo nuestro, seguro que nos diría que no.
Que el sector primario tiene que exigir mucho claro que si. Que quiere vivir de su trabajo y no de la PAC, también, que al existir La PAC esta debería tener un reparto más justo, en función de la necesidad y no de la cantidad de producción seguro. Pero también llevarse por la razón y no por los que digan y se vistan con piel de corderos, de seguro que en un futuro serán auténticos lobos carroñeros que lo único que cuidarán son los intereses de los que más tienen, y los esbirros de los que ni aman ni desean la libertad. Y por último algo muy importante al menos para la mayoría, tener a la ciudadanía de parte del sector debería ser también un compromiso del sector por apartarse de los cantos de sirena de los que la libertad que les gusta es sólo la suya.
FERNANDO ALEMÁN
La popular y veterana emisora de radio "Radio faro del Noroeste" sigue su proyección hacia una mayor ampliación de su cobertura.