De enero a junio, el SUC ha atendido 1.089 demandas sanitarias diarias. El 73% de las demandas necesitaron la activación de un recurso sanitario, principalmente ambulancias de soporte vital básico. Los helicópteros y el avión fueron movilizados en casi mil ocasiones, de enero a junio

El Servicio de Urgencias Canario (SUC), adscrito a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, prestó asistencia a 190.636 personas durante el primer semestre de 2022 y atendió una media de 1.089 demandas sanitarias al día.

En este periodo, de enero a junio, se han gestionado un total de 197.140 demandas sanitarias, de las cuales un 38,3% (75.562) estuvieron relacionadas con situaciones de emergencia sanitaria, o lo que es lo mismo, de peligro inminente para la vida de los afectados.

Del total de demandas, más de un 26% del total (52.439) fueron resueltas por los coordinadores sanitarios del SUC, médicos y enfermeros presentes en las salas operativas, sin que fuera necesario la movilización de recursos de emergencias sanitarias, principalmente como consulta médica de urgencias.

Por otra parte, el 73% de las demandas necesitaron que el SUC movilizara un recurso sanitario. En este sentido, entre enero y junio, la mayor parte de las activaciones correspondió a las ambulancias de soporte vital básico (con técnicos de emergencias sanitarias TES), en 119.484 ocasiones, seguidas de las ambulancias medicalizadas (con personal médico y de enfermería) con un total de 9.422 y las ambulancias sanitarizadas (con enfermería) en 8.773.

Otros recursos terrestres del SUC, como vehículos de asistencia médica, atención domiciliaria, vehículos de coordinación e intervención rápida, así como personal de Atención Primaria, fueron movilizados en 8.888 ocasiones en el primer semestre.

En lo que se refiere a los recursos aéreos medicalizados, los dos helicópteros y el avión, fueron activados 949 veces.

En cuanto a la tipología de asistencias por parte de los profesionales de los recursos, el 84,2% estuvo relacionada con algún tipo de enfermedad, ya fuera en domicilio o lugar público, mientras que los accidentes, que pueden ser de tráfico, laborales, en el hogar o de otro tipo, aglutinaron el 15,8% del total.

El destino de los afectados que precisaron traslado fue principalmente un hospital público, en un 62,5% de los casos, seguidos de los centros de Atención Primaria, con un 15% de los traslados y los centros privados, que alcanzaron el 7,6%. El resto, lo que supone casi el 15% de los afectados, fue dado de alta en el lugar de la asistencia.

El SUC insiste en prevenir la situación de riesgo con una correcta manipulación y manteniendo la cadena de frío

El Servicio de Urgencias Canario (SUC), adscrito a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, recuerda que uno de los riesgos más comunes de esta época del año, con el aumento de las temperaturas y en algunos casos tras romper la cadena de frio en la conservación de los alimentos, son las intoxicaciones alimentarias o las gastroenteritis.

Si a pesar de haber tomado todas las precauciones, alguna persona presenta síntomas como náuseas, vómitos o diarreas debe acudir a su centro de salud o ponerse en contacto con el 1-1-2 para seguir las indicaciones del médico coordinador del SUC. En el caso de que el afectado comience con hinchazón de labios, párpados y/o sensación de aumento de volumen de la lengua, o sensación de falta de aire, podemos estar ante un cuadro de intoxicación grave.

Como en otros riesgos, la mejor vacuna es la prevención. El SUC recomienda llevar a cabo una alimentación rica en frutas, verduras y hortalizas, evitando las grasas y los alimentos enlatados. Si manipulamos alimentos crudos, debemos tener en cuenta que no podemos reutilizar los utensilios usados con otro tipo de alimentos sin lavarlos previamente. Además, es importante mantener la cadena de frío de los alimentos y protegerlos de la exposición al sol.

En caso de realizar una comida al aire libre es imprescindible transportarla en neveras portátiles que garanticen el mantenimiento de una adecuada temperatura para conservar los alimentos en buen estado, así como evitar consumir platos que puedan descomponerse fácilmente en caso de altas temperaturas. La comida debe estar bien tapada para evitar la entrada de insectos o polvo, por ejemplo.

Las señales más frecuentes son dolor de cabeza, sensación de fatiga, náuseas o vómitos, sed intensa y sudoración, pero en casos graves la piel está seca, caliente y enrojecida y se puede llegar a convulsionar

Con la llegada del verano y episodios de altas temperaturas aumenta el riesgo de sufrir enfermedades relacionadas con el calor como la insolación y el golpe de calor, por lo que el Servicio de Urgencias Canario (SUC), dependiente de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, recuerda la importancia de actuar ante la aparición de los primeros síntomas, que varían en función de la gravedad del cuadro, para evitar situaciones de emergencia que hagan peligrar la vida de las personas.

Una insolación puede manifestarse de varias formas. En los casos de menor gravedad la persona puede presentar dolor de cabeza, cara congestionada, sensación de fatiga, náuseas o vómitos, sed intensa y sudoración abundante, mientras que en los casos graves no existe sudoración, sino que la piel está seca, caliente y enrojecida. Además, hay riesgo de convulsionar, sobre todo, en los niños menores de 3 años, y de provocar alteraciones de conciencia.

Para el SUC, ante la aparición de los primeros síntomas hay que colocar a la persona afectada a la sombra, en un lugar fresco y ventilado. A continuación, se recomienda poner paños húmedos en la frente y flexuras (muñecas, ingles…) y suministrar agua, pero bebiéndola a pequeños sorbos. Asimismo, se debe colocar a la persona en posición de antishock, es decir, tumbado boca arriba con las piernas ligeramente levantadas y la cabeza ladeada.

Sólo en el caso de que exista una alteración de la conciencia, no se debe suministrar ni comida ni agua. En ese caso, cuando los síntomas fueran más graves como tener la piel seca y caliente o presentar convulsiones, hay que alertar urgentemente al teléfono de emergencias 1-1-2 donde los médicos del SUC nos indicarán cómo actuar hasta la llegada de un recurso sanitario, ya que podemos estar ante una emergencia, llegando a ocasionar incluso la muerte, debido a un fallo generalizado de los mecanismos que regulan la temperatura corporal.

No obstante, al igual que ocurre en otras situaciones de emergencias, el SUC hace hincapié en la prevención. Por ello, hay que estar atentos a las alertas por altas temperaturas y seguir las recomendaciones preventivas que establece el Gobierno de Canarias como evitar la exposición al sol en horas de mayor intensidad -de 12:00 a 17:00 horas-, utilizar gorras, ropa fresca, no realizar ejercicio físico intenso bajo el sol o en las horas de más calor y tomar líquidos con frecuencia como el agua.

En este sentido, los grupos más susceptibles de sufrir una insolación o un golpe de calor son los niños y las personas mayores, ya que en estas edades el organismo tiene más dificultad para regular la temperatura del cuerpo. Igualmente, junto a otros factores de riesgo, también puede influir la toma de diferentes fármacos como, por ejemplo, diuréticos y antihistamínicos, o padecer ciertas enfermedades como la diabetes. Por todo ello, se debe extremar las precauciones con estas personas más propensas a sufrir dicha patología, aportándoles líquidos de forma periódica y procurando refrescar la habitación en la que se encuentran.

El coordinador sanitario del SUC realizará la teleasistencia a través de la línea de emergencias para ayudarte a revertir una parada cardiorrespiratoria

Cualquier ciudadano puede ser testigo de una emergencia o un accidente, tanto en una vivienda como en la vía pública, y convertirse en el primer interviniente. La asistencia inicial al afectado puede ser vital para su supervivencia y podrá evitar graves secuelas, especialmente si se encuentra en parada cardiorrespiratoria, situación en la que la vida de la persona depende de una intervención inmediata. En este sentido, el Servicio de Urgencias Canario (SUC), adscrito a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, nos recuerda cómo poner en práctica la cadena de supervivencia hasta la llegada de los servicios de emergencia.

Cuando observamos que una persona ha sufrido un desvanecimiento o se encuentra inmóvil sin saber la causa, debemos mantener la calma, observar qué ha pasado y las condiciones en las que se encuentra. Si no respira y está inconsciente, es decir, aparentemente parece que duerme y no responde, todo indica que se encuentra en parada cardiorrespiratoria y debemos actuar con rapidez comenzando a practicar maniobras de reanimación.

Es de vital importancia llamar inmediatamente al 1-1-2 para que un coordinador sanitario del SUC pueda valorar la situación y dar las indicaciones a seguir. Durante esta conversación telefónica es fundamental poner el móvil en manos libres y responder a las preguntas que se realizan sin perder tiempo mientras se activan los recursos. La duración de la llamada no retrasa el envío de las ambulancias al lugar que son movilizadas desde que se recibe la alerta.

Una vez confirmado que el paciente se encuentra en parada cardiorrespiratoria, la persona que va a prestar la ayuda deberá seguir las indicaciones del SUC, colocar al afectado en el suelo, abrir la vía aérea inclinando la cabeza del paciente hacia atrás presionando sobre su frente, subiendo la barbilla y tirando de ella para abrir la boca, localizar el punto exacto donde se debe realizar el masaje cardiaco, en el medio de una línea imaginaria que une los dos pezones y comenzar a realizar las compresiones torácicas.

Otro eslabón fundamental de esta cadena, que junto a las maniobras de reanimación cardiopulmonar constituye la llave de la supervivencia, es la desfibrilación precoz puesto que un gran porcentaje de las paradas cardiorrespiratorias se producen por una fibrilación ventricular o una alteración del ritmo cardiaco que puede ser revertida con un desfibrilador. En la actualidad, gran cantidad de lugares de pública concurrencia, como instalaciones deportivas, estaciones de guaguas o centros comerciales disponen de uno de ellos. Estos lugares cuentan normalmente con personal formado para su utilización, aunque no hay que olvidar que su aplicación también puede ser teledirigida por un coordinador sanitario del SUC durante la llamada al 1-1-2.

Los eslabones de esta cadena continúan con la intervención del personal sanitario que se hace cargo de la asistencia del afectado, que una vez recuperado y estabilizado, es trasladado al hospital correspondiente.

Si presenciamos un ahogamiento, los médicos coordinadores insisten en la importancia de alertar cuanto antes al sistema de emergencias para garantizar que llega la ayuda

Empieza la Semana Santa y el Servicio de Urgencias Canario (SUC), adscrito a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, aprovecha esta ocasión para recordar a la población una serie de medidas preventivas para disfrutar de estas vacaciones sin riesgos.

Antes de acudir a la playa debemos conocer la previsión meteorológica para descartar si existe una alerta por fenómenos costeros, lo que prohibiría el baño. Si no es el caso, cuando nos encontremos en la playa siempre hay que respetar las señalizaciones e indicaciones de los socorristas que nos informarán si las condiciones del mar son aptas o no para el baño.

Al bañarnos, es recomendable entrar en el agua poco a poco para evitar los cambios bruscos de temperatura y apartarse de las zonas de corriente.

Además, ante cualquier síntoma de malestar como sensación de fatiga, dolor de cabeza o pinchazos en la nuca, picores en el abdomen, brazos y piernas, escalofríos o tiritona persistente acompañado de enrojecimiento de la piel, sensación de vértigo, mareo o zumbidos en los oídos, visión borrosa y calambres musculares o dolores articulares, hay que salir inmediatamente del agua y pedir ayuda.

En el caso de que vayamos a la playa con niños hay que extremar las precauciones vigilándolos cuando estén en el agua o jugando cerca de ella, y si acudimos con personas mayores o que padezcan algún problema de salud, debemos acompañarlas siempre a la hora de darse el chapuzón.

Cómo actuar en caso de ahogamiento

Si presenciamos un ahogamiento, es importante alertar al servicio de socorrismo en playa o al sistema de emergencias a través del teléfono 1-1-2 para garantizar que la ayuda sanitaria llegue cuanto antes.

En el caso de que una persona se encuentre en apuros en el mar, el SUC advierte al que vaya a auxiliarlo que, además de ser un buen nadador, siempre debe acudir con algún objeto que flote (tubo de rescate, salvavidas, tabla de surf…) que sirva de ayuda para evitar una segunda víctima. Aun así, si el rescate no es seguro, es preferible que sea efectuado por los servicios profesionales y no poner en peligro la vida de más personas.

La forma de acercarse a la víctima cuando ésta se encuentra en el agua también es muy importante. Si la persona está consciente, hay que hacerlo por detrás para evitar que si entra en pánico se agarre al socorrista y terminen hundiéndose los dos. Hay que pasar los brazos por debajo de las axilas de la víctima, sujetándola firmemente y buscando la flotabilidad, y si se dispone de un flotador colocarlo entre nuestro pecho y su espalda. Es importante hablarle al oído para tranquilizarlo y que colabore.

Si por el contrario el afectado se encuentre en estado inconsciente, hay que sacarle la cara del agua lo antes posible. Una vez en tierra, hay que comprobar si el afectado respira y tiene pulso.

Cuando la persona está consciente, respira o tose, aunque sea con dificultad, hay que colocarla en la posición lateral de seguridad hasta que llegue la ayuda sanitaria.

En el caso de que no respire y no tenga pulso, significa que el afectado se encuentra en parada cardiorrespiratoria, y se debe comenzar a realizar masaje cardiaco hasta la llegada de los equipos de emergencias. Si la persona que asiste al afectado no sabe cómo realizar estas maniobras de reanimación, durante su llamada al 1-1-2 un médico coordinador del Servicio de Urgencias Canario le prestará teleasistencia indicándole los pasos a seguir.

Los estudiantes del último curso del ciclo aprenden con incidentes reales los protocolos de actuación y se familiarizan con la aparatología y el material de los recursos sanitarios

Desde el mes de marzo, un centenar de estudiante del ciclo de Técnico en Emergencias Sanitarias (TES) de diferentes institutos y centros formativos de Gran Canaria, Lanzarote, Fuerteventura, Tenerife y La Palma realizan su formación práctica en ambulancias de soporte vital básico del Servicio de Urgencias Canario (SUC), dependiente de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias.

En este periodo formativo, el alumnado aprende a enfrentarse a situaciones reales y a conocer el trabajo que desarrollarán cuando se incorporen al mercado laboral. En este sentido adquieren destreza en el manejo de la aparatología y el material con el que cuentan estos recursos y ponen en práctica los protocolos de actuación sanitarios, gracias a la colaboración de los profesionales de las ambulancias del SUC.

Esta formación también incorpora conocimientos prácticos sobre la coordinación de los recursos, comunicaciones con la sala operativa, técnicas de movilización y de inmovilización del paciente y transporte sanitario, así como valoración y asistencia del paciente durante el traslado.

Las prácticas forman parte del último curso del ciclo de Técnico de Emergencias Sanitarias y las están realizando con el SUC los alumnos del IES La Orotava Manuel González Pérez, IES Magallanes-San Isidro y CIFP Los Gladiolos, en Tenerife; IES Virgen de las Nieves, en La Palma; IES Primero de Mayo y CIFP Villa de Agüimes, en Gran Canaria; CIFP Zonzamas, en Lanzarote; y CIFP Majada Marcial, en Fuerteventura.

Más de 20.000 personas recibieron asistencia sanitaria en la isla cuando se encontraban en situación de urgencia o emergencia

Lanzarote fue la tercera isla en la que se registró mayor actividad del Servicio de Urgencias Canario (SUC) en 2021, tras Gran Canaria y Tenerife, resolviendo un total de 20.357 incidentes el pasado año, de los que el 71,2% fueron situaciones de urgencia o emergencia.

En la resolución de estos incidentes, el Servicio de Urgencias Canario, dependiente de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, asistió 20.078 personas las cuales recibieron asistencia sanitaria por parte de los coordinadores sanitarios mediante teleasistencia o por medio de la red de recursos asistenciales con que cuenta el SUC, es decir, ambulancias de diferentes tipos, según las características del incidente, o los medios aéreos, helicópteros y avión medicalizados.

Del total de los incidentes resueltos, 20.357, un 15% de las intervenciones se debieron a accidentes de tráfico, deportivos o laborales, entre otros, mientras que en el 84,9% de ocasiones restantes se trataron casos de enfermedad.

Desglosados por tipología de incidentes, el Servicio de Urgencias Canario intervino, en Lanzarote, en 8.964 emergencias, las más numerosas. Le siguen las urgencias sanitarias, con 5.538 resueltas por el SUC y, a continuación, las consultas sanitarias que alcanzaron la cifra de 4.011. A ello hay que añadir los 1.844 transportes sanitarios urgentes y secundarios a y desde diferentes centros sanitarios.

Si trasladamos este análisis a todo el Archipiélago, el SUC atendió, el pasado año, un total de 371.030 peticiones de ayuda sanitaria, unas 1.017 al día, en las que este servicio prestó algún tipo de asistencia a 367.263 personas que se encontraban en situación de urgencia o emergencia.

Para dar respuesta a estas solicitudes, los médicos y enfermeros coordinadores del SUC precisaron, en el 71,6 % de las ocasiones, la movilización de recursos sanitarios, mientras que en el 28,4% restante, las 105.236 demandas fueron resueltas desde las dos salas operativas del 1-1-2 del Gobierno de Canarias mediante consultoría médica -con el asesoramiento telefónico de los profesionales sanitarios- o información, sin necesidad de activar ningún recurso.

Cerca de 3.900 personas recibieron asistencia cuando se encontraban en situación de urgencia o emergencia

El Servicio de Urgencias Canario (SUC), dependiente de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, ha dado respuesta durante 2021 en La Gomera a 3.910 incidentes y ha asistido a 3.892 personas que se vieron implicadas en los mismos y requirieron algún tipo de asistencia sanitaria por parte de los coordinadores sanitarios, a través de la teleasistencia o consultoría médica o bien con la red de recursos asistenciales, es decir, ambulancias, helicópteros o avión medicalizados.

Del total de incidentes, el Servicio de Urgencias Canario ha intervenido en 996 emergencias sanitarias y en 932 situaciones de urgencia sanitaria, lo que supone el 40% de la actividad registrada en esta isla. Por su parte, las consultas sanitarias fueron los servicios más demandados por los ciudadanos en esta isla, ya que el SUC atendió un total de 1.736, mientras que los traslados de pacientes con diferentes patologías entre centros sanitarios y hospitalarios sumaron 246 actuaciones.

Por tipología, las intervenciones relacionadas con casos de enfermedad superaron el 91% de los servicios, mientras que los 341 restantes, el 8,7% del total, estuvieron relacionados con accidentes de diversa índole, como tráficos, deportivos o laborales.

En todo el Archipiélago, el SUC atendió, el pasado año, un total de 371.030 peticiones de ayuda sanitaria, unas 1.017 al día, en las que este servicio prestó algún tipo de asistencia a 367.263 personas que se encontraban en situación de urgencia o emergencia.

Para dar respuesta a estas solicitudes, los médicos y enfermeros coordinadores del SUC precisaron, en el 71,6 % de las ocasiones, la movilización de recursos sanitarios, mientras que en el 28,4% restante, las 105.236 demandas fueron resueltas desde las dos salas operativas del 1-1-2 del Gobierno de Canarias mediante consultoría médica -con el asesoramiento telefónico de los profesionales sanitarios- o información, sin necesidad de activar ningún recurso.

Del total de incidentes, el 76% se clasificaron como urgencias o emergencias, mientras que el resto fueron consultas o transportes secundarios

El Servicio de Urgencias Canario (SUC), dependiente de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, asistió el año pasado en La Palma, a 9.990 personas que necesitaron algún tipo de atención sanitaria, ya fuera a través de los coordinadores sanitarios mediante teleasistencia o por medio de la red de recursos asistenciales con que cuenta el SUC, es decir, ambulancias de diferentes tipos según las características del incidente, o por medios aéreos con helicópteros o avión medicalizados.

En cifras globales, el SUC gestionó en La Palma 10.078 incidentes, de los cuales 3.951 fueron urgencias sanitarias y 3.779 urgencias, lo que supone un 39,2% y un 37,5% del total de la actividad en la isla respectivamente. A esto se le suman 2.127 consultas médicas y 221 transportes sanitarios urgentes y secundarios a diferentes centros sanitarios.

La mayoría de las demandas sanitarias, el 87%, correspondieron, como en años anteriores, a casos de enfermedad y problemas de salud con 8.834 intervenciones. El resto, 1.244 casos, estuvieron relacionados con los accidentes de tráfico, deportivos o laborales, entre otros, lo que supone algo más de un 12% del total de la actividad.

En todo el Archipiélago, el SUC atendió, el pasado año, un total de 371.030 peticiones de ayuda sanitaria, unas 1.017 al día, en las que este servicio prestó algún tipo de asistencia a 367.263 personas que se encontraban en situación de urgencia o emergencia.

Para dar respuesta a estas solicitudes, los médicos y enfermeros coordinadores del SUC precisaron, en el 71,6 % de las ocasiones, la movilización de recursos sanitarios, mientras que en el 28,4% restante, las 105.236 demandas fueron resueltas desde las dos salas operativas del 1-1-2 del Gobierno de Canarias mediante consultoría médica -con el asesoramiento telefónico de los profesionales sanitarios- o información, sin necesidad de activar ningún recurso.

Casi 14.900 personas recibieron algún tipo de asistencia sanitaria por este servicio de atención extrahospitalaria urgente

El Servicio de Urgencias Canario (SUC), dependiente de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, resolvió el pasado año 15.113 incidentes, lo que la sitúa como la cuarta isla con mayor volumen de actividad en el Archipiélago tras Gran Canaria, Tenerife y Lanzarote. De total de incidentes, 5.955 fueron emergencias sanitarias y 4.221 urgencias, lo que supone un 39,4% y un 27,9% del total de la actividad en la isla respectivamente. A esto se le suman 2.815 consultas médicas y 2.122 transportes sanitarios urgentes y secundarios a y desde diferentes centros sanitarios.

Durante el año 2021, 14.895 personas recibieron algún tipo de atención sanitaria por el SUC, ya fuera a través de los coordinadores sanitarios -médicos y enfermeros- mediante teleasistencia o por medio de la red de recursos asistenciales con que cuenta el SUC, es decir, ambulancias de diferentes tipos según las características del incidente, o helicópteros y avión medicalizados.

La mayoría de las demandas sanitarias, el 88%, correspondieron, como en años anteriores, a casos de enfermedad y problemas de salud con 13.309 intervenciones. El resto, 1.804 casos, estuvieron relacionados con los accidentes de tráfico, deportivos o laborales, entre otros, lo que supone casi un 12% del total de la actividad.

En todo el Archipiélago, el SUC atendió, el pasado año, un total de 371.030 peticiones de ayuda sanitaria, unas 1.017 al día, en las que este servicio prestó algún tipo de asistencia a 367.263 personas que se encontraban en situación de urgencia o emergencia.

Para dar respuesta a estas solicitudes, los médicos y enfermeros coordinadores del SUC precisaron, en el 71,6 % de las ocasiones, la movilización de recursos sanitarios, mientras que en el 28,4% restante, las 105.236 demandas fueron resueltas desde las dos salas operativas del 1-1-2 del Gobierno de Canarias mediante consultoría médica -con el asesoramiento telefónico de los profesionales sanitarios- o información, sin necesidad de activar ningún recurso.