Gáldar: El Festival La Guancha pone en pie al público en su primera jornada

Gáldar disfrutó ayer de la primera jornada del Festival La Guancha con un éxito de público. El recinto de ‘La Quinta’ presentó un aforo de cerca de 5.000 personas desde el comienzo a las 21.00 horas y hasta el final ya a las 2.00 de la madrugada. Este sábado continúa la jornada con otro cartel de lujo.

El festival, organizado por la concejalía de Cultura, que dirige Julio Mateo Castillo, arrancó anoche con el género urbano del cantante grancanario Marcelo Mellino y continuó a las a las 22 horas con el tinerfeño El Ima. A las 23 horas, mientras, Chema Rivas subió al escenario con su género urbano latino y la jornada prosiguió a las 24.00 horas con el reguetón de Henry Méndez. Por último, la noche del viernes concluyó con Lennis Rodríguez desde la 1 de la madrugada.

Con este destacado grupo de artistas regresaba el Festival La Guancha dos años después con esquema propio debido a que en las dos ediciones anteriores las restricciones impuestas por la pandemia del coronavirus obligaran dejarlo enmarcado en las Fiestas Mayores de Santiago.
Pero el Festival continúa este sábado, y también a lo grande, de la mano de cuatro artistas de sonidos latinos que apuntan a llenar el recinto de ‘La Quinta’. Así, la jornada arranca a las 21.00 horas con Aseres y continúa a las 22.30 con Coti, cantautor argentino de proyección internacional. Posteriormente, a las 24.00 vuelve a Gáldar el conocido artista puertorriqueño Edwin Rivera. Concluye la jornada a partir de las 1.30 de la madrugada la orquesta tinerfeña La Sabrosa.

Este histórico festival, que cumple su 24 edición, reivindica el valor patrimonial del yacimiento de La Guancha, el primer bien arqueológico protegido en Canarias desde 1949 donde el Ayuntamiento está construyendo actualmente, después de más de cuarenta años de demandas, su Centro de Interpretación.

A lo largo de su cerca de cuarto de siglo de existencia han pasado por él artistas y agrupaciones reconocidas a nivel regional y nacional y ha ido evolucionando de la mano de los gustos musicales del momento pero manteniendo su esencia de concienciar a la ciudadanía sobre el valor patrimonial de uno de los principales yacimientos de Canarias.