La consulta de Disfagia del HUC atendió a más de 700 pacientes el año pasado

Enero 15, 2024

Se trata de un equipo multidisciplinar, en la que participan los servicios de Endocrinología y Nutrición, Radiología, Otorrinolaringología y Logopedia

La consulta de Disfagia del Complejo Hospitalario Universitario de Canarias (HUC), adscrito a la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, atendió el pasado año a 364 pacientes ambulatorios y 382 pacientes hospitalizados, un total de 746 pacientes. Se trata de una Unidad multidisciplinar con la colaboración de los servicios de Endocrinología y Nutrición, Radiología, Otorrinolaringología y Logopedia (Rehabilitación).

La disfagia orofaríngea es la dificultad para formar y/o desplazar el bolo alimenticio de manera segura y eficaz desde la boca al esófago. Cualquier alteración en el proceso de la deglución, sea por causa mecánica o fisiológica, puede producir este trastorno de la deglución y la alimentación.

El objetivo de esta consulta es poder dotar a las personas con disfagia de las herramientas necesarias para que establezcan una nutrición eficaz y segura mediante el uso de técnicas instrumentales y funcionales. Se analizan diferentes variables que pueden afectar la eficacia y/o seguridad de la mecánica deglutoria de la persona con disfagia de cara a poder ofrecer pautas y recomendaciones que mejoren la calidad de vida del paciente y sus cuidadores en su día a día.

En este sentido, se trabaja desde esta Unidad, pionera en la provincia de Santa Cruz de Tenerife para la asistencia de estos pacientes, evitando así las posibles complicaciones que derivan de esta patología, como son respiratorias y nutricionales, lo que además supone una reducción del coste sanitario.

La disfagia afecta al 8% de la población española

La detección y el tratamiento precoz de esta patología permiten evitar las complicaciones asociadas a la disfagia: pérdida prolongada de peso, problemas de desnutrición y/o deshidratación, o enfermedades respiratorias, como neumonías por aspiración. A estas complicaciones ha de sumarse el deterioro de la calidad de vida de un paciente con disfagia, afectando directamente a su estado psicológico –con estados de ansiedad o depresión.

Presenta una elevada prevalencia y morbimortalidad, y en la mayoría de los casos no está diagnosticada ni tratada, lo que menoscaba la calidad de vida de las personas que la padecen, pudiendo tener importantes repercusiones en su estado de salud, y llegando a requerir ingresos hospitalarios.

La disfagia puede estar presente en varias patologías neurológicas, como en el ictus, entre un 30% y un 65%. En la enfermedad de Parkinson, la disfagia aparece entre el 52% y el 82% de las personas con la enfermedad. En el caso de la esclerosis lateral amiotrófica o en fases avanzadas de la enfermedad de Alzhéimer, la prevalencia de la disfagia es mayor. Los datos recogen que más del 40% de las personas mayores hospitalizadas presentan disfagia, y que aproximadamente el 38% de los pacientes traqueo tomizados en UCI también sufren este trastorno. En el caso de personas con cáncer de cabeza y/o cuello, la probabilidad de presentar disfagia es muy alta, superando fácilmente el 80%.